En la noche del Jueves Santo del año 1957 salía en procesión, por primera vez, la cofradía del Santo Cristo del Oratorio de Cristo Rey de Inca.
El oratorio de Cristo Rey, dependiente de la parroquia de Santa María la Mayor, la única que existía en Inca, estaba activo desde el 5 de octubre de 1952. En el año 1956, fruto de unos ejercicios espirituales dirigidos por el jesuita P. Ricardo Domènech se adquirió, por suscripción popular, una imagen del Santo Cristo crucificado.
Con la pertinente autorización del Rector Buades nació la Cofradía de Cristo Rey para fomentar la devoción a la Imagen. En 1959 se erigió canónicamente la segunda parròquia de Inca, la de Cristo Rey. Un año después, en septiembre de 1960, siendo ecónomo de la parròquia Mn. Rafael Cladera, se le otorgó a la Imagen la advocación del Santo Cristo del Perdón y la Buena Muerte, cambiando también el nombre de la cofradía al de Cofradía del Santo Cristo del Perdón y la Buena Muerte.
El primer acompañamiento musical con el que contó la cofradía fueron cuatro tambores que participaron por primera vez en la Semana Santa de 1986. En 1997 se amplia la sección de tambores, y a la par, se crea una sección de cornetas, participando, por primera vez en las procesiones como Banda de Cornetas y Tambores integrada en el seno de la cofradía y con su misma indumentaria.
El año 2016, año en el que la banda celebraba su 30 aniversario, participó por primera vez en la Trienal del Santo Cristo de Alcudia (Julio) y en la procesión de la clausura del año de la Misericordia en Inca (Noviembre). Ya en 2017, en el mes de mayo, encabezó la procesión con la que se conmemoraban los 50 años de la Coronación Canónica de Santa María la Mayor de Inca.
En el año 1990, el 12 de abril, la cofradía estrenaba el paso Jesús Azotado, paso portado a hombros por turnos de entre 24 y 32 portadores/as. La figura central es la Imagen de Jesús atado a la columna. Esta imagen ya desfiló con nuestra cofradía en las procesiones del Jueves Santo, de los años 1988 y 1989, portada por cuatro penitentes. La flanquean un verdugo y un centurión romano.
En el año 2006 se restauró la venerada Imagen del Santo Cristo, con la colaboración de la cofradía. Entre otras acciones se cambió la cruz original, muy deteriorada, por otra más resistente. Posteriormente, esta cruz fue restaurada por los cofrades y se convirtió en el segundo pasó de la cofradía. En el año 2014 participó por primera vez en la procesión del Viernes Santo portada en alto por tres cofrades.
Los cofrades visten túnica, capirote y guantes blancos, capa roja con adornos dorados, faja también roja y zapatos negros. Los portadores no llevan capa ni capirote. Hasta el año 2006 se desfilaba portando un cirio eléctrico, actualmente el cirio, propiedad de la cofradía, es un báculo rematado con una corona plateada alumbrado con parafina.
El primer estandarte se conserva en la parroquia de Cristo Rey, el que se utiliza actualmente fue bendecido el domingo de Ramos de 2006.